¿Cómo actuar si la calidad del agua suministrada no es apta para el consumo?
El agua suministrada debe cumplir con los estándares de calidad establecidos por ley. Si no es apta para el consumo, puedes reclamar.
Pasos para reclamar:
Documenta el problema:
Toma muestras del agua y, si es posible, realiza análisis que confirmen su mala calidad.
Contacta con la empresa suministradora:
Notifica el problema y solicita una solución inmediata.
Consulta al organismo regulador:
Contacta con la entidad de control de calidad del agua en tu comunidad autónoma.
Reclamación formal:
Si no hay respuesta, presenta una queja en la OMIC.
Normativa aplicable:
Real Decreto 140/2003, que regula la calidad del agua para consumo humano.
Consejos prácticos:
Conserva todas las comunicaciones con la empresa para respaldar tu reclamación.
Si el problema afecta a la salud, consulta con las autoridades sanitarias locales.
Este artículo tiene fines informativos generales. Para obtener información completa sobre nuestras garantías y actualizaciones legales, te invitamos a leer nuestro Aviso Legal.
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