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Una tienda online fraudulenta es un sitio web creado con la intención de engañar a los consumidores, ya sea vendiendo productos falsificados, cobrando por productos que no se entregan o robando datos personales y financieros.

Señales de una tienda online fraudulenta:

Precios excesivamente bajos: Ofertas demasiado buenas para ser ciertas suelen ser un indicador de fraude.

Falta de información legal: No proporciona datos como nombre del titular, dirección física, o contacto de atención al cliente.

URL sospechosa: La web puede tener un nombre de dominio extraño o no utilizar cifrado SSL («http://» en lugar de «https://»).

Opiniones falsas o inexistentes: No hay reseñas verificables o las que existen son sospechosamente perfectas.

Cómo protegerte de estas tiendas:

Investiga la tienda: Busca opiniones en sitios de consumidores y verifica su reputación.

Verifica la seguridad del sitio: Asegúrate de que la URL tenga el candado de seguridad y que la página cumpla con las normativas de privacidad.

Usa métodos de pago seguros: Evita transferencias bancarias directas y prefiere plataformas como PayPal o tarjetas de crédito con protección contra fraudes.

Qué hacer si has sido víctima:

Notifica inmediatamente a tu banco para bloquear tu tarjeta y solicitar la reversión del cargo.

Denuncia el sitio web ante la Policía Nacional o la Guardia Civil.

Reporta la tienda fraudulenta en plataformas de hosting o en foros de consumidores.

Consejos prácticos:

Compra únicamente en sitios con una trayectoria comprobada.

Usa contraseñas únicas y seguras para cada tienda.

Desconfía de webs que te presionen a actuar rápido con ofertas «limitadas».